Quizás por edad o por tradición, los Reyes Magos habéis sido desde la infancia mis referentes a la hora de solicitar muchos de mis sueños, no solo para “ese día” el de más trabajo, pues mi egoísmo en mis deseos, es para todo el nuevo año que empieza.
Quiero hacer pública la carta que me gustaría enviarles para ver si me conceden queridas majestades todo cuanto desearía pedirles. Quiero un mundo mejor, sin egoísmos, pobreza ni guerras, sin vencedores ni vencidos. Quiero un trabajo digno para cada persona. Quiero un gobierno con políticos honrados, cercano con sentimiento hacia quienes peor lo pasan. Quiero una justicia independiente, ética, equitativa y honesta. Quiero un Aragón mejor. Quiero que nuestra voz se escuche con rasmia suficiente para reivindicar ante gobiernos centralistas, las promesas olvidadas que llevan años dejadas en un cajón. Quiero que los aragoneses y aragonesas sientan orgullo de nuestro pasado, de nuestro patrimonio material y cultural y de sus lenguas. Quiero un presente y un futuro, con ambición, sin complejos ante nada ni nadie. Que los aragoneses y aragonesas sintieran más amor por su tierra.
Queridas majestades sé que son muchos mis deseos, pero más las necesidades. Ojalá estos mis deseos lo repartan sus majestades por todas las casas Aragon y del mundo.
Daniel Gallardo Marin