24.6.17

Alcornoques repartidos por todas las esquinas

Contradicciones y meteduras de pata de algunos de nuestros avispados políticos estos días están a la orden.  Puigdemont, mientras compara a lo bestia su proceso secesionista con la lucha contra la banda terrorista ETA, los de Lérida le salen ranas y pasan del referéndum soberanista. En estas, lo más relevante de los valientes que se atrevieron a ver la maratoniana moción de censura contra Rajoy, tiene gracia que fuera el trabalenguas, “Cuanto peor mejor para todos. Y cuanto peor para todos etc.”.

Su cuate Montoro, como dice mi admirado Trasobares, se pasó en su día por el forro el Constitucional, y dio amnistía fiscal con excusas peregrinas a los grandes defraudadores. Ahora el mismo ministro cambia de rumbo y propone al Congreso prohibir la amnistía fiscal por ley.

El mal está hecho, no pasa nada. No antes haber insultado con un agravio comparativo al currito que justifica cada año su esmirriada nómina hasta el último euro. Lambán, en su apasionado apoyo a la política andaluza y poniendo a caer de un burro a Pedro Sánchez, no cayó en la cuenta en las consecuencias que le lastrarían si ganaba, como así sucedió, al que tanto despreció.

Nuevamente en ese afán de decantarse hacia un bando sin antes pensarlo un poco, vuelve a meter la pata. En su apoyo como siempre desmedido y ante la gran campaña del fútbol Huesca, va y dice, “este es el equipo más importante de Aragón”, creándose infinidad de enemigos en el seno zaragocista.

Tan tranquilo que venía el comisario europeo, el socialista Pierre Moscovici, llega ahora Sánchez ”correveydile” de Podemos, con tal de vestirse cuanto antes de presidente, va y le dice al francés que el Tratado de libre comercio con Canadá no va con él. Tratado respaldado hace unos meses por su partido en el Congreso y en el europarlamento. Cisma habemus.

La vuelve a liar, contentando a los Psoepodemistas y cabreando a los afines de la andaluza. Total que  lejos de unir al partido lo deja como estaba…, si no peor. El alcornoque si va a ser el árbol singular de Aragón, no estará mal que lo fuera para todo el estado.

Daniel Gallardo Marin